Es, sin duda alguna, el congreso y la exposición de viveristas productores de plantas ornamentales más importante del país. Dos eventos orientados principalmente a empresarios y profesionales del sector, pues, como recuerda la organización, el ingreso no es libre para el público en general.

La Asociación Argentina de Floricultores y Viveristas (cuenta con más de 60 años) ha sabido, contra toda crisis, mantener un Congreso que, en el pasado abril, alcanzó su trigésimo tercera edición junto a su Exposición 12.ª.

Estos dos encuentros se realizan año por medio, y son esperados por los proveedores para viveros y por los clientes que llegan de toda la Argentina y, además, de los países limítrofes —principalmente Uruguay y Brasil—.
Y cada vez más, son aguardados por los paisajistas, que, de un tiempo a esta parte, han comenzado a tomar contacto directo con los cultivadores.

Dentro de las novedades que se presentaron en esta edición, Vivero Di Carlo presentó la Eugenia myrtifolia aurea (Syzygium paniculatum `Variegata Alba´) —por el momento, sólo comercializable en tamaño de cuatro litros—; mientras tanto, Cultivos Las Novedades, especializado en plantas de interior, aprovechó el Congreso para presentar su nueva imagen, que incluye un cambio completo del tradicional logotipo de la empresa. Y aunque varios presentes coincidieron en que, básicamente, no se advirtieron importantes novedades en cuanto a especies y variedades de plantas, Cultivos Fucsia sorprendió a todos con unas simpáticas plantas de algodón, ideales para comercializarlas en los viveros de venta al público como “un detalle de color”.

Por otro lado, uno de los temas que se trataron “en los pasillos y en los stands” fue la crisis económica y la sequía. Todos los concurrentes coincidieron en que este año no habrá plantas de tamaños grandes, a lo que se sumará un bajo stock en todos los tamaños. Un productor de San Pedro dijo: No hay lapachos, jacarandá, rosas ni cítricos. Y algunos productores estimaron que, si la situación sigue igual, el año que viene va a haber un 50% menos de rosas, y que si todo se desarrolla bien, recién en 2011 se va a normalizar el stock que habitualmente se podía encontrar en el mercado.