La higuera
Porque es áspera y fea,
porque todas sus ramas son grises,
yo le tengo piedad a la higuera.
En mi quinta hay cien árboles bellos,
ciruelos redondos,
limoneros rectos
y naranjos de brotes lustrosos.
En las primaveras,
todos ellos se cubren de flores
en torno a la higuera.
Y la pobre parece tan triste
con sus gajos torcidos que nunca
de apretados capullos se viste…
Por eso,
cada vez que yo paso a su lado,
digo, procurando
hacer dulce y alegre mi acento:
«Es la higuera el más bello
de los árboles todos del huerto».
Si ella escucha,
si comprende el idioma en que hablo,
¡qué dulzura tan honda hará nido
en su alma sensible de árbol!
Y tal vez, a la noche,
cuando el viento abanique su copa,
embriagada de gozo le cuente:
¡Hoy a mí me dijeron hermosa!
Juana de Ibarbourou
Un poema cálido, que habla sobre el sentimiento del que observa, en este caso a la higuera, quien esconde detrás de su cuerpo, alejado del concepto actual de belleza, preciosos frutos.
Hay en cada relación, ya sea familiar o de trabajo, la necesidad de ser reconocidos y de reconocer al otro.
Vernos en el otro, sentir que damos y nos dan reconocimiento, ya sea por la tarea que realizamos, como por nuestra diferente manera de ser. Jamás olvidemos que somos seres únicos.
El trato hacia los demás, sea quien sea, debe darse de la misma manera en que nos gustaría que nos trataran a nosotros: respeto, calidez, poder ver cualidades. Cada uno responde según la educación recibida, en un primer momento, dada por la familia. Luego ya somos responsables de adquirir nuevos conocimientos.
Hay capital humano en las empresas que, como la higuera, pasan inadvertidos y no son requeridos para trabajos donde la vista sea lo primordial, pero a la hora de dar frutos, son unos de los mejores.
Todos estamos requiriendo atención, abrigo, ternura, y un espacio para desarrollar nuestro potencial.
Las empresas familiares son un espacio ideal para fortalecer, sin competencias, a los miembros que las componen.
Las palabras, la mirada, la atención que damos a cada integrante, marcará la diferencia de los resultados. Todos formamos parte del mismo jardín. |