Probablemente usted siente que el tiempo pasa cada vez más rápido y que el volumen de cosas para hacer se acrecienta aún más. El aumento de la competencia ha aplastado los márgenes de las ganancias que genera, a su vez,  una presión irresistible en el aumento de los volúmenes de producción. Eso reduce el margen de errores, dificulta el control de calidad y obliga al empresario a asumir costos más elevados. Es la cadena del hacer más en menos tiempo.

En el rubro de la floricultura, todos son pequeños. Los productores lo son en relación con los productores de otras áreas, y los floristas son pequeños comparados con otros comercios.  Entonces, por esa razón, introducir el tipo de acción citada (hacer más en un tiempo menor) es todo lo que un pequeño comercio no debería hacer.

La llegada del año nuevo es siempre motivo de reflexión y también es el momento apropiado para  planificar la etapa que comienza, y es, tal vez, la ocasión de pensar en el plan estratégico de la empresa. Por lo tanto, podríamos preguntarnos: ¿Cómo podemos mejorar los márgenes de las ganancias y lograr el valor agregado que permita invertir en el negocio y asegurar nuestra competitividad? Las respuestas serán específicas para cada caso, ya que la visión empresarial de cada uno advertirá las oportunidades que les sean más favorables. El nuevo enfoque debe de ser más o menos como esto: HACER MENOS Y MEJOR.

Existe una barrera psicológica de "regresar", es decir, reducir el tamaño de su negocio. Se tiene una sensación de pérdida. Pero el hecho es que nadie puede trabajar en forma productiva al 100% en el 100% del tiempo. Ese esfuerzo debe utilizarse sólo en situaciones concretas. Perder tiempo detrás de lo improductivo, sólo aumenta los costos. Aquel que no se toma su tiempo para pensar no gana dinero.

Aquí se presentan algunos males que puede acarrear la estrategia de HACER MÁS EN MENOS TIEMPO:
• Mayor posibilidad de errores.
• Más trabajo por rehacer.
• Probablemente, mayor insatisfacción de los clientes.
• Menor lealtad.
• Aumenta la falta de pagos.
• Incremento de costos.
• Crecen los problemas de los recursos humanos.
• Aumenta el estrés.
• Los resultados se aguardan a corto plazo.
• Se tiene menos equilibrio emocional.

Por otra parte, cuando enfocamos nuestro interés en la estrategia HACER MENOS Y MEJOR, podemos advertir:
• Más costos y menos facturación en primera instancia, pero se construye una situación sostenible a largo plazo.
• Más innovaciones y más valor agregado.
• Mayor capacidad de inversión.
• Aumenta la capacitación del personal (una mejor selección de los empleados).
• Mejores relaciones con los clientes (y con esa situación se capta más oportunidades de negocios).
• Aumenta la lealtad.
• Menos impagos.
• Mayor éxito en la puesta en marcha.
• Mejora en las asociaciones.
• Mejor trato por parte de los proveedores.
• Menos dependencia de la situación económica.
• Menos problemas de RR. HH.
• Mejor calidad de vida.

Ya lo hemos dicho antes, el modo en que pueda aplicarse  esa estrategia dependerá de la visión emprendedora de cada empresa. También estará relacionada con el tiempo que usted pueda reservar para pensar acerca de ello. Veamos algunas pistas sobre dónde encontrar esas oportunidades:
• ¿De qué manera el cliente gana dinero con su producto o en qué forma él se realiza con su producto? Respecto de esa situación, ¿usted podría mejorarla en beneficio de él?
• ¿Cómo podría ahorrar tiempo para su cliente?
• ¿Cómo le brindaría mayor atención a sus mejores clientes?
• ¿Cómo les ahorraría mano de obra a sus clientes?
• ¿Cómo podría ayudar a que sus productos tengan clientes únicos?
• ¿Cómo usted podría especializarse en la atención de las solicitudes difíciles?
• ¿Qué servicio incluiría que sus competidores no lo hayan hecho?

Existen otras posibilidades y usted podrá descubrirlas observando a su cliente. Invierta algún tiempo en eso, porque es cierto que esas oportunidades no son tan claras en lo cotidiano, deben ser percibidas, por eso son oportunidades. Quien no tiene tiempo para observar nunca podrá crear. Redescubra su espíritu de investigación y entre en el terreno, haciendo de los próximos meses un período estratégico para definir cómo usted puede cambiar su empresa para el 2009. ¡No deje que la vida lo lleve!