Mónica Muiña es paisajista formada en John Brookes School of Garden Desing, en la Argentina. Con un inquebrantable entusiasmo consiguió reunir la obra de numerosos referentes del paisajismo nacional en un libro con prólogos de Virginia Laboranti (presidenta del Cámara Argentina de Arquitectos Paisajistas) y de la reconocida paisajista Cristina Le Mehauté.
Mónica, ¿cómo nace la idea del libro?
Las dificultades que encontraba cada vez que buscaba información para el desarrollo de un proyecto era que si bien a nivel diseño eran maravillosos y muchos aportaban nuevos conceptos de paisajismo, al llegar a la implementación aparecían problemas con el uso de la vegetación. Diferencias de climas y de suelos impiden muchas veces la utilización de plantas que no crecen bien en estas latitudes o simplemente no se consiguen, dando un resultado muy diferente al de los jardines europeos. Por otro lado, aquí hay paisajistas excelentes y muy experimentados en nuestra problemática.
Haber logrado tal convocatoria debe de haber sido difícil...
Hubo mucha generosidad por parte de todos ellos al compartir sus proyectos al desnudo, contando realmente cómo trabajan, no sólo con fotos. La idea era mostrarnos como equipo, apuntando a un mismo objetivo y creo que éste es el punto más valioso del libro. Dejar los egos atrás y mostrar en conjunto nuestra capacidad creativa, que por supuesto, se explaya en diferentes estilos, pero donde subyace un denominador común distinto al de otras partes del mundo.
¿Cuál fue la idea que estructuró el libro?
Mostrar el paisajismo nacional en un amplio espectro, los distintos estilos de nuestros jardines y, por añadidura, a los paisajistas argentinos.
Por otro lado, quise mostrar cuáles son las distintas etapas en el diseño de un espacio verde, más las nociones básicas de diseño. Los pasos esenciales se encuentran detallados en todos los proyectos, en forma tácita o explícita: relevamiento, desarrollo del diseño y ejecución del proyecto.
¿Es un libro solamente para paisajistas o también para el público general?
El fin del libro es que sirva como herramienta de consulta para aquellos que trabajamos en esta profesión, para los que estudian y para los amantes del jardín, que quieran construirlo ellos mismos. También puede ser de utilidad para aquellos que ya saben que contratarán a un paisajista; para poder comprender y acompañar mejor su trabajo.
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