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El Ing. Agr. Oscar J. Herrera -Director de Cultivo de la firma Arie Sonneveldt- acerca su experiencia a fin de evitar que esta enfermedad afecte la producción de Alegría del Hogar. Estrategias para el accionar defensivo dentro del sector de producción1.
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En un artículo previo publicado por Economía & Viveros, Marta Rivera y Eduardo Wright hablaron sobre la reciente detección, en nuestro medio, de mildiu en dicha planta (Alerta con las Alegrías del Hogar): quedó claramente expuesto que el control de esta preocupante enfermedad no podrá confiarse, en forma exclusiva, al uso de agroquímicos.
Entre las limitaciones, figura que los fungicidas más efectivos conocidos son específicos; no todos están disponibles o autorizados (localmente) para su uso en floricultura; son esencialmente preventivos: no curan; tienen corto efecto residual (aplicaciones semanales), y, por otra parte, se puede esperar que incidan, significativamente, en los costos de producción: numerosos tratamientos con varios productos, elevados volúmenes de aplicación y efectividad terapéutica variable.
¿Cómo podrá encararse este desafío?
Conociendo al enemigo, es decir, sus fortalezas y debilidades, y cómo opera dentro del sistema productivo-comercial-paisajístico.
El patógeno (Plasmopara obducens) produce dos tipos de esporas (invisibles, individualmente, al ojo humano), que sirven para su propagación, dispersión y supervivencia:
a) de Vida Corta (zoosporas): originadas en el moho blanquecino que aparece en la cara inferior de las hojas infectadas. Estas esporas pueden dispersar la enfermedad a distancias cortas mediante las prácticas de cultivo (riego, manipulación) y a grandes distancias (varios km) por viento.
b) de Vida Larga (oosporas): se producen dentro de los tallos y las hojas infectados, al liberarse en el suelo/sustrato a partir de la descomposición de los restos vegetales. Pueden sobrevivir a las bajas temperaturas (hibernación) y a la ausencia de las plantas, originando infecciones futuras, in situ o ex situ, dispersadas por el viento, los animales y el hombre.
La rápida propagación que puede alcanzar la enfermedad exige que el cultivador sepa reconocer, tempranamente, los síntomas -ver: Alerta con las Alegrías del Hogar, de Rivera y Wright-, y adopte estrategias para bloquear el contagio e instalación.
El hongo requiere de humedad para producir esporas y establecer la infección. El follaje húmedo durante 4 h o más, la HR (humedad relativa) mayor al 85% y las temperaturas frías (especialmente nocturnas) propician el desarrollo de la enfermedad.
Por ello, las prácticas de riego/fertirrigación deben ejecutarse temprano por la mañana para que las hojas lleguen secas al anochecer. No regar innecesariamente. En Alegría esto promueve el fenómeno de gutación (excreción foliar de agua líquida), que crea condiciones altamente predisponentes para la infección. Emplear la información meteorológica pronosticada para organizar las prácticas de riego/fertirrigación y eludir los días nublados y fríos. Promover, reguladamente, el intercambio de aire (ventilación) aun en días lluviosos, y el movimiento suave del aire (ventiladores) dentro del invernáculo, si fuera posible. Durante jornadas frías realizar ciclos de calentamiento-ventilación para reducir la HR durante el día, y evitar grandes cambios de temperatura al atardecer, ya que favorecen la condensación sobre el follaje.
No hay recuperación conocida para las plantas afectadas. Es necesario examinar regularmente los lotes e identificar los ejemplares enfermos y/o sospechosos. A las plantas que guarden vecindad de un metro con aquella que presente moho blanquecino, se las considerará bajo compromiso. El material enfermo se debe retirar cuidadosamente (embolsado) del espacio de cultivo y posteriormente debe ser quemado. El lugar libre de restos vegetales, macetas y sustrato, debe ser desinfectado, así como también, las manos, la ropa y el calzado del operador.
La desinfección de los espacios de cultivo es importante incluso en ausencia de la enfermedad, y si esta estuvo presente, hay que procurar el cultivo de otras especies (excepto Brinco) en dicho sitio. No hay que compostar los restos de Alegría. El sustrato y las macetas deben ser aislados y prontamente desinfectados. No almacenar materiales procedentes de plantas enfermas en cercanía de otros nuevos, ni de fuentes de agua de riego superficiales, como los estanques.
La separación de las plantas juega un papel relevante desde el punto de vista preventivo: favorece la aireación e insolación, y reduce la humedad y condensación dentro del lote, sobre todo cuando se cultiva directamente sobre el piso del invernáculo; aumenta la eficacia de los tratamientos químicos debido a una mayor intercepción, horizontal y vertical, del plaguicida por las plantas; disminuye la comunicación entre ejemplares enfermos y sanos; facilita la visualización y extracción de plantas atacadas, e incrementa el vigor del tejido vegetal.
También debe ser atendido el estado nutricional del cultivo, dado que una mala nutrición provoca una mayor vulnerabilidad. Existe mucha información científica que apoya el rol defensivo de varios elementos: formas de nitrógeno, potasio, calcio, micronutrientes, y sus relaciones, contra las enfermedades2.
Cómo puede aparecer
La aparición de mildiu en Alegría, en un establecimiento sin antecedentes, reconoce varias causas posibles:
a) ingreso no percibido de material enfermo sintomático y/o asintomático. Al respecto, el riesgo de introducir la enfermedad a través de almácigos y plugs producidos a partir de semilla se considera mínimo. Hasta el presente no hay evidencias de que el patógeno se transporte dentro de la semilla o fuera de ella. En cambio, el riesgo se triplica al emplear material multiplicado por gajo (Alegrías dobles, típicamente). Sería conveniente separar este tipo de materiales y también, los procedentes de distintas fuentes;
b) pertenecer a un área con alerta de la enfermedad. Se estima que el riesgo de contagio aumenta veinte veces en las proximidades a un foco de infección por mecanismos naturales de dispersión. Pero, la comercialización puede conectar zonas infectadas y libres a grandes distancias. Los cajones de madera vacíos pueden seguir actuando como núcleo de contaminación después de haber transportado plantas enfermas;
c) no haber conocido la preexistencia de la enfermedad. No está claro si está patología es nueva en nuestro medio o había pasado inadvertida (sin registros).
1 Agradecimientos: a los doctores Marta Rivera y Eduardo Wright -Cátedra de Fitopatología de la UBA-, por la revisión crítica del original y sus valiosos comentarios.
2 Las plantas jóvenes son especialmente vulnerables. Por ello, en respuesta a las inquietudes del sector, en el establecimiento de Arie Sonneveldt S.R.L, se dispuso la producción de almácigos y plugs de Alegría del Hogar en ausencia total de plantas adultas, la implementación de un protocolo de tratamientos químicos preventivos contra mildiu y un autocontrol sanitario mediante envío periódico de material para su análisis fitopatológico a la Cátedra de Fitopatología, FAUBA.
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Continúan apareciendo plantas infectadas -principalmente, en la provincia de Misiones-. El Gobierno ya reconoció denuncias en fincas comerciales, aunque todavía la Argentina continúa con su estatus de zona libre de este virus. Cuáles son las incumbencias del SENASA y del INASE. |
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El viverista Gabriel Arletti, uno de los socios de Neyger, empresa asesora en producción de plantas nativas para proyectos de esta naturaleza, acerca su experiencia: Si bien en la Patagonia, existen antecedentes de revegetación en emplazamientos petroleros, en minería, no había nada. |
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Este año celebra su décimo quinto aniversario, y su presidente, Gustavo Ogata, recuerda sus inicios. Además: capacitaciones, eventos, la Orquídea de Plata 2015 y por qué es difícil que una planta vuelva a florecer. |
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Augusto Aki -consultor internacional en comercialización florícola- estuvo en nuestro país brindando uno de los cursos de la Maestría en Floricultura (ULZ-INTA) y actualizó su visión sobre este sector. A su vez: ofrece sugerencias para incrementar las ventas. |
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Entreplantas Viajes Está organizando un recorrido por las ciudades más importantes de Japón, en donde se visitarán sus jardines clásicos y contemporáneos (incluido el Hokkaido Garden Show). Planeada para un grupo de entre diez y catorce pasajeros, la visita contará con guía y coordinación en español. Quienes así lo deseen pueden pedir una extensión a China, agregó una de sus directoras, la paisajista Mariela Schaer. Más información: entreplantasviajes@gmail.com |
CABA El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires recuperó el alegórico monumento la Floralis Genérica. Donada a la Ciudad en 2002 por su autor, Eduardo Catalano (argentino), esta flor se convirtió en la primera escultura móvil porteña. Mide más de veinte metros, pesa veinticuatro toneladas, y se abre y se cierra con la luz solar. Una vez inaugurada, su funcionamiento fue breve, ya que el mecanismo que la rige se rompió a causa de los vientos de una fuerte sudestada. |
INTA Expone Del 4 al 6 de septiembre, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria exhibe esta muestra del trabajo que viene llevando adelante en la zona cuyana. Bajo el lema “Territorio, trabajo y valor agregado en origen”, realizará la décima edición del evento que ya ha convocado a centenares de miles de personas en todo el país. INTA Expone Cuyo 2015 tendrá lugar en la provincia de San Juan (Villa Aberastai). |
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Te enseñamos cómo hacer para mantener las plantas sanas. La importancia del diseño y la manera de armar diferentes purines -de compost, humus de lombriz y ortigas-, que inducen su resistencia a plagas y enfermedades. Por Gabriela Escrivá |
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Un trabajo de investigación del Instituto de Floricultura del INTA brinda datos sobre la multiplicación de estas plantas por medio del sistema in vitro y la rustificación de las mismas -cuidados y sustratos-. |
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Sabías que... | Por Tristán Simanauskas |
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