Un trabajo de investigación del Instituto de Floricultura del INTA y la Universidad Nacional del Sur nos revela el comportamiento de estas plantas: Sedum acre, Portulaca gilliesii, Nierembergia híbrida, Gomphrena celosioides, Glandularia perakii, Acaena pinatífiday Grahamia bracteata.
Resumen de difusión*
Los techos verdes sustentables se caracterizan por requerir una mínima intervención; su comunidad vegetal debe persistir en el tiempo manteniendo su composición y diversidad, tolerando restricciones hídricas y nutricionales.
En el presente trabajo, se evaluó la respuesta al estrés hídrico en genotipos selectos de cuatro especies nativas. El experimento se realizó entre octubre y diciembre del año pasado.
Se utilizaron doce bandejas plásticas (54 x 35 x 7 cm) con un sustrato de base inorgánica (perlita, microleca, pometina, zeolita) con un 20 % de materia orgánica (turba).
Se plantaron cuatro mix de plantas diferentes, compuestos por dos suculentas (Sedum acre, Portulaca gilliesii) y una herbácea: Nierembergia híbrida (N. veitichii x N. aristata), en combinación con una de las cuatro especies seleccionadas para techos verdes: Gomphrena celosioides, Glandularia perakii, Acaena pinatifida, Grahamia bracteata.
En cada bandeja, se plantaron ocho individuos de cada especie, repitiéndose en tres bandejas. Se regaron todas con igual cantidad de agua. Al cabo de catorce días se suspendió el riego. Durante setenta y cuatro días, se tomaron observaciones diarias del estrés sufrido por cada planta, considerando como síntomas la epinastia y el acartuchamiento de la lámina foliar, o el encogimiento de las hojas de las suculentas.
Luego de suspender el riego, G. bracteata al igual que P. gilliesii y S. acre, a los veintiún días, manifestaron el primer síntoma de déficit hídrico. N. híbrida, a los dieciséis, evidenció el estrés, mientras que las demás especies lo manifestaron entre los seis y los ocho días.
Al finalizar el ensayo, se observó que solamente S. acre, P. gilliesii y G. bracteata presentaban un estrés hídrico reversible. Y son estas dos especies nativas las que manifestaron el mayor potencial para formar parte de una comunidad vegetal apta para techos verdes sustentables.
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Responde la Ing. Agr. Silvina Soto**
¿Las plantas que no fueron aprobadas murieron?
Si bien no puede afirmarse que las otras especies hayan perecido, a los fines de cumplir su función se consideran ¨deficientes¨. La cualidad de tolerar períodos prolongados de estrés y aún reanudar su crecimiento determina el éxito a largo plazo de la implantación, al asegurar un establecimiento suficiente y la menor invasión de malezas para ocupar los espacios vacíos. Otra de las cualidades buscadas es que si una especie cambia su cobertura en una estación del año, se prevean otras especies para complementarlas.
¿Por qué se utilizan diversas especies?
La diversidad vegetal procura lograr una cubierta verde durante todo el año, una buena calidad estética y una cobertura total de la superficie sin dejar espacios vacíos. La interacción entre las diferentes especies es beneficiosa para obtener una estabilidad en el tiempo y resistir con mayor éxito condiciones adversas, como el calor extremo o los largos períodos de sequía.
¿Qué época de implantación es la más recomendada?
Las épocas ideales de implantación mediante plántulas podrían ser el otoño y la primavera. El verano no sería la época más apropiada para realizar la implantación de un techo verde; si bien las especies utilizadas, como Sedum y Portulaca, son de alta rusticidad, las temperaturas extremas del verano pueden ocasionar un estrés en las plántulas y un establecimiento deficiente en el sustrato del techo.
* Tolerancia al estrés hídrico en especies nativas destinadas a techos verdes. Por Sisaro, D.; Comezaña, M.; Soto, M.S.; Stancanelli, S. **Coautora del trabajo.