IMÁGENES DE NUESTRA FLORICULTURA La 62.ª edición de la Fiesta Nacional de la Flor presentó un récord de público. Las cuentas de la Sociedad Civil Fiesta de la Flor están saneadas.

Del 4 al 12 de octubre pasado, en Escobar (Buenos Aires), la tradicional muestra de la floricultura argentina celebró su 62.ª edición. Bajo el lema Año del Girasol, contó con un balance muy positivo. En esta oportunidad, tuvo más de 70.000 visitantes a lo largo de nueve jornadas. Según su presidente, Tetsuya Hirose, fue una de las mejores de los últimos diez años.

Una presentación renovada y floreciente

El predio de la Ciudad Floral de Escobar volvió a llenarse de color, aromas y actividades. Hubo desfile de carrozas, elección de embajadores y una amplia muestra de plantas ornamentales y flores de corte.

Comenzamos el primer fin de semana de octubre por razones económicas —explicó Hirose—, ya que a fin de mes la gente no tiene dinero. Y la decisión resultó acertada: la Fiesta fue un éxito.

Además, la Sociedad Civil Fiesta de la Flor presentó, por primera vez, la Virgen de las Flores, una imagen que rindió homenaje al espíritu del evento. Y, en el rubro de los accesorios que aportaron mayor jerarquía y colorido a la muestra, también se exhibieron floreros.

De la crisis a la recuperación

Durante décadas, la Fiesta Nacional de la Flor atravesó dificultades económicas que pusieron en riesgo su continuidad. La situación se agravó en 2020, cuando la pandemia de Covid-19 obligó a realizar la 57.ª edición de forma virtual, lo que privó a la institución de los ingresos por entradas y publicidad.

Respecto al convenio con la Municipalidad de Escobar, el resultado es excelente —afirmó Hirose—. De estar quebrados durante la pandemia, este año construimos tres aulas con equipamiento nuevo para nuestro Instituto de Florihorticultura y Jardinería. En pocas palabras, estamos económicamente bien, sin deudas.

El Instituto de Florihorticultura y Jardinería —creado en 1978 e incorporado a la enseñanza oficial— funciona dentro del predio y depende de la Sociedad Civil Fiesta de la Flor. Cada año, forma a jóvenes técnicos especializados en floricultura y jardinería. Es una institución privada, subvencionada, que durante años atravesó una compleja situación financiera.

Un convenio clave para la continuidad

La recuperación comenzó con la firma de un convenio entre la Sociedad Civil Fiesta de la Flor y la Municipalidad de Escobar, luego de que la entidad comunicara su difícil situación económica.

El acuerdo establece que la Sociedad cede el uso y goce del predio y sus instalaciones al municipio por un período de diez años, a cambio de que este asuma los gastos de infraestructura y mantenimiento.

Durante la segunda quincena de septiembre y la primera de octubre de cada año, la Sociedad retoma el uso del espacio con el objetivo de organizar la Fiesta Nacional de la Flor.

El municipio, por su parte, se hace cargo del pago de servicios, tributos municipales y provinciales, así como de los salarios del personal afectado al mantenimiento, sin generar vínculos laborales con la institución.

Una tradición que florece cada año

La Fiesta Nacional de la Flor se realiza ininterrumpidamente desde 1964, cuando fue reconocida como celebración nacional por el entonces presidente Dr. Arturo Illia. En 1968, la entidad obtuvo personería jurídica. Y, en 1969, adquirió seis hectáreas en Escobar, donde un año más tarde, se inauguró la primera ciudad floral de la Argentina.