El Jardín Botánico Carlos Thays ha recibido un nuevo subsidio internacional: el proyecto Recuperación de Flora Nativa del Delta del Paraná ha sido seleccionado por la Fundación Botánica Klorane junto con Laboratorios Pierre Fabre, bajo el seguimiento de Botanic  Gardens  Conservation  International para su realización.

La región del Bajo Delta del Paraná constituye una unidad natural de características biogeográficas y ecológicas únicas en la Argentina. Hacia fines del siglo XIX, los albardones perimetrales de estas islas estaban ocupados por el "monte blanco" (nombre asignado probablemente por la tonalidad clara de las cortezas de las especies componentes) o selva en galería con importante complejidad estructural y diversidad específica, constituido por especies provenientes de la selva paranaense y los bosques chaqueños. En la actualidad, el monte blanco fue eliminado casi en su totalidad en las islas del Bajo Delta del río Paraná y solo se encuentran parches relictuales con escasa representación a nivel regional. Esta situación fue producto del uso de los albardones por actividades frutihortícolas, durante la primera mitad del siglo XX, y a una intensa práctica forestal con salicáceas -explican-.

El proyecto se centra en la conservación de especies leñosas del monte blanco y comprende la colecta científica en el hábitat original, la reproducción y cultivo de las especies target y el aumento de su presencia en la colección viva del Jardín Botánico Carlos Thays, además de otros jardines regionales. A su vez,  propone la restauración de un área degradada en la Reserva Natural Delta Terra, administrada por la Fundación Azara y ubicada sobre el arroyo Rama Negra, en el delta bonaerense. 

El proyecto trabaja sobre tres ejes fundamentales para un Jardín Botánico: producción y conservación de biodiversidad, educación sobre el valor de la naturaleza y construcción de conciencia pública sobre la importancia del mundo vegetal.