Guillermo Grimoldi: influencer líder de la Argentina

Vive en la provincia de Córdoba y tiene más de 470.000 seguidores que buscan consejos sobre jardinería. Conoce su historia y cómo trabaja con su equipo de colaboradores.

Durante muchos años, fui propietario de un vivero familiar con el que realicé parquización y ornamentación interior y exterior de paseos, plazas, edificios públicos y gran cantidad de obras privadas en la Argentina, nos cuenta Guillermo Grimoldi (61).

Hace más de veinte años dicto cursos de temáticas relacionadas con la jardinería a diferentes instituciones y en la actualidad continuo de forma online.

Grimoldi se recibió de óptico y contactólogo. Estudió Agronomía y una licenciatura en Gestión Ambiental, pero no llegó a terminar esas carreras. Y desde hace treinta años, se capacita de forma autodidacta en jardinería.

Cuéntanos sobre tu historia como divulgador de esta profesión.

En 2003, me incorporé como columnista en Cadena 3 Argentina. En la actualidad, continúo en la emisora en dos de los programas más escuchados de la provincia de Córdoba. También participé con segmentos de jardinería en programas televisivos como El Doce.tv, entre otros.

Escribí para diarios y revistas (La voz del interior o Rumbos de Vía País) durante casi dieciséis años.

Soy autor de los best seller: Secretos del jardín, Hagamos la Huerta, Orgánica y en familia, Agenda del Jardín 2016, Guía del jardín 2017, Guía del jardín 2018 y Guía del jardín 2020. Tengo más de cien mil obras vendidas.

En 2012, comencé a conectarme con mis seguidores a través de las redes sociales.

Actualmente, dicto cursos online para todo el mundo, brindo capacitaciones, charlas y asesorías para municipios y/o empresas privadas de Latinoamérica. Doy consejos de jardinería en mis redes sociales y Cadena 3 Argentina, y empresas del rubro patrocinan los mismo.

Tres consejos puntuales que les darías a los jardineros.

El problema de algunos jardineros es comunicacional. Aprendemos idiomas o qué quiere decirnos nuestro perro, pero nunca nos preocupamos por conocer el idioma de las plantas.

Para que un jardinero sea exitoso deberá aprender que la planta es un ser vivo con requerimientos y cuidados específicos. Deberemos aprender su idioma para poder interpretarlo.

Consejos: Observar el color y el espesor de las hojas, el tipo y color de la flor, la estructura, el espesor, la epidermis pubescente o glabra y la disposición en la rama. Con esos datos podremos inferir el hábitat al que pertenece y sus cuidados.

Conocer el suelo al que pertenece: esto se infiere por la coloración y el tamaño de sus hojas. Mientras más verde y grande sea la hoja, el suelo será más parecido al de una selva (pH levemente ácido). Si son de verde más claro, gruesas y pequeñas, corresponden a un suelo pobre (suelo arenoso, levemente alcalino).

Saber cuál es el origen de la planta: no es el mismo tipo de necesidades y reacciones que tiene una planta reproducida por semilla que aquella obtenida por esqueje o por acodo, y muy diferente a una multiplicada por injerto (con un pie).

¿Cómo es el trabajo para llegar a ser influencer?

En la actualidad somos un equipo de cinco personas. Paula, que es periodista y se encarga de la comunicación integral de la marca, marketing, prensa, convenios. Pedro y Agustín, quienes trabajan en el posicionamiento mediante SEO (estrategias y técnicas de optimización de búsquedas por Internet) y todo lo referido a mi canal de YouTube. Josefina es licenciada en Comunicación y desarrolla su actividad en atención al cliente y lo vinculado a la comunicación de los cursos online. A la par, en casos puntuales, también participan diseñadores gráficos, programadores o diferentes especialistas del marketing digital.

¿Qué es lo más curioso que te consultaron a través de las redes?

Lo más curioso que me preguntaron en redes fue cómo hacer para que los conejos no comieran las alegrías (Impatiens) blancas, ya que de otros colores no las comían.

Le sugerí que las rociara con agua de jabón blanco con pimienta blanca molida. Grande fue mi sorpresa cuando a los quince días me contó que ya no comían las blancas y quería saber cómo hacer para que no le comieran las rosadas o rojas (pensando que al variar el color de la flor, debía haber algún cambio en la mezcla de pimienta y jabón).