La Niña y el cambio climático

Desde 2019, gran parte de la Argentina así como parte de la región próxima a nuestro país han experimentado condiciones de sequía. En los últimos cuatro meses de 2022, se recibió solo el 44 % de la precipitación media, lo que constituye el menor valor en treinta y cinco años.

Cabe preguntarse si es, en efecto, el cambio climático el causante de esto. En tal sentido, en la World Weather Attribution realizaron un análisis de atribución con el objetivo de determinar la relación entre ambos factores.

En la investigación, no encontraron evidencia suficiente de que la situación se deba al cambio climático. Comunicaron que un factor importante para tener en cuenta, al buscar las causas del déficit de lluvias, podría ser La Niña, que, durante 2022, se hizo sentir por tercer año consecutivo. En la región de estudio, este evento incrementa las posibilidades de altas temperaturas y de la baja precipitación.

Sin embargo, es sabido que las olas de calor sí incrementaron su frecuencia, intensidad y duración, debido al cambio climático.

Se encontró que, en los modelos estudiados, los valores de temperaturas registrados a fin de 2022 (atribuidos al cambio climático) tuvieron un impacto en la disminución del agua disponible superficial. Esto indicaría que el cambio climático probablemente haya reducido la reserva de agua, lo que agravó la situación de la sequía.

Dentro de este panorama, uno de los mayores afectados es, sin duda, el sector florícola, ya que se ha generado un estrés térmico e hídrico sobre los cultivos.

Fuente: Servicio Meteorológico Nacional