El presidente de la International Association of Horticultural Producers, Bernard Oosterom, presenta dicha entidad y comenta parte de la información ofrecida en su anuario estadístico sobre la Argentina.
La AIPH, es la International Association of Horticultural Producers (Asociación Internacional de Productores Hortícolas). Somos una organización sin fines de lucro, registrada en Bruselas (Bélgica). Nuestra sede está ubicada en la Horticultural Trades Association (ReinoUnido), comienza explicando Bernard Oosterom, presidente de esta agrupación. Actualmente, la AIPH integra asociaciones de veintiocho países (full-member), ubicadas en diferentes partes del mundo (Asia, Europa y América). Además, reúne a los denominados affiliate members: empresas u organizaciones que venden servicios o productos al sector ornamental.
Fundada en 1948, dentro del marco de celebración de los cincuenta años de la Asociación Suiza de Horticultura (habían sido invitadas varias asociaciones a fin de que participaran del festejo). Fue en ese momento, en que se tomó la decisión de dar una nueva vida a la Union Horticole Professionelle Internationale (fundada en 1909, pero que había dejado de funcionar durante las guerras mundiales y crisis económicas). A continuación, fue llamada AIPH, y comenzó a reunir a las principales asociaciones europeas con el objetivo de representar y defender los intereses de la horticultura ornamental en el mundo, así como también, difundir y promover el consumo de plantas y flores.
¿Qué actividades realiza la Asociación?
Desde su creación, la AIPH siempre ha tenido como prioridad organizar las ferias internacionales de horticultura ornamental, como por ejemplo la Taichung World Flora Exposition (que se realizará en unos días, en Taiwán) o la Floriade (2022, en Almere/Ámsterdam).
A través del Green City Movement, la AIPH también ha jugado un papel relevante en la creación de ciudades y regiones sostenibles (plenas de plantas y flores). Otras actividades se manifiestan a través del apoyo para afrontar conjuntamente problemas fitosanitarios en el mundo.
En setenta años, la AIPH ha logrado establecer un importante compromiso con la sociedad. Así, aspectos como la sostenibilidad, la seguridad fitosanitaria y las relaciones con las Administraciones de muchos países y ciudades en el mundo son solo algunos ejemplos en las que está presente la AIPH.
¿Cuentan con miembros latinoamericanos?
Hace algunos años invitamos a Brasil y a Colombia a sumarse, y estamos orgullosos de esto. Sin embargo, nos gustaría mucho poder dar la bienvenida a más miembros de América Central y del Sur, ya que cubren áreas de producción muy importantes.
En la gran familia que es la AIPH, discutimos cómo interpretar los importantes desarrollos mundiales en este campo, sin que haya competencia directa. Los debates en la AIPH se van traduciendo en desarrollos locales, pero siempre con el objetivo de abrirse al mundo.
¿Qué costo tiene formar parte de la AIPH?
De nuestros miembros se espera, además de una contribución anual de 1500 euros, una actitud activa. Valorizamos la participación y la presencia en nuestros congresos que se organizan, anualmente, dos veces. A lo largo del año, los miembros están en contacto, intercambiando información o experiencias profesionales, y, cuando surgen preguntas, ellos responden. Asimismo, en ocasión de surgir preguntas específicas o planes concretos para organizar una exposición mundial de horticultura relacionados con Green City Movement, viajamos al extranjero para discutir con las administraciones e instituciones nacionales.
¿Qué impresión tienen de la floricultura argentina?
Sé que la Asociación Argentina de Floricultores y Viveristas (AAFV) está organizando, para abril de 2019, un gran evento. Este sería un excelente escenario para presentar su posible incorporación a la AIPH.
En cuanto a la Argentina, lamento muchísimo decir que estoy poco informado y, por consiguiente, no me atrevería a comentar sobre su floricultura. Sería una buena idea pasar algún tiempo allí para poder tener una visión general de lo que significa su floricultura. Sin embargo, examinando de cerca ese país, puedo vislumbrar un potencial enorme y observar que tienen una gran variedad de excelentes condiciones climáticas.
Por otro lado, también he escuchado hablar del Centro Argentino de Arquitectos Paisajistas y de la Federación Internacional de Arquitectos Paisajistas. El redactor de la revista profesional Floraculture International, que desde la primavera de este año ha sido incorporado a la AIPH, me ha informado que estos organizan congresos con objetivos muy similares a los de la AIPH. Opino que hay muchísimas oportunidades para crear sinergias e intercambios.
En el International Statistics Flowers and Plants 2017, dicen presentar información de la Argentina; ¿qué datos ofrecen sobre nuestro país y cuáles han sido las fuentes?
Estos datos cubren información sobre áreas de producción, números de viveros, etc. Los hemos obtenido a través de Daniel Morisigue y de Ingrid Villanova, que trabajan en el Instituto de Floricultura del Inta. Pero es cierto que nos falta mucha información sobre el sector argentino. Si la AAFV y la AIPH logran trabajar juntas, podríamos contribuir al desarrollo del sector y de la horticultura ornamental argentina, y a su proyección internacional.
Bernard Oosterom
Nací en el seno de una familia de productores de plantas ornamentales y, desde joven, ayudaba a mis padres en la empresa. Junto a mi hermano, hemos trabajado y hemos ido evolucionando dentro de la empresa, pero también, con ella.
En la década de los setenta, empezamos con el cultivo de plantas tropicales comprando ejemplares jóvenes en América Central. Como consecuencia, visité varias veces estos países, tejiendo relaciones profesionales que aún perduran.
Ya a la edad de veintinueve años, decidí comprometerme en la gestión del mercado de las flores de Aalsmeer (Países Bajos). Durante mucho tiempo, fui presidente, primero del Verenigde Bloemenveilingen Aalsmeer (en Aalsmeer), y, al producirse la fusión con Bloemenveiling Holland (mercado de subastas), también de la Royal Flora Holland.
En 2016, me despedí de Royal Flora Holland (ya que se cumplió mi término electoral). Por otro lado, a partir de 2012, he trabajando para la AIPH: los primeros años, como
vicepresidente, y, desde 2015, como presidente.
Agradecemos la colaboración especial de Ron van der Ploeg (revista Floraculture International).